Este hotel tradicional e histórico está situado en una zona tranquila en las afueras de Aufhofen, a 20 km al sur de Múnich. Los huéspedes podrá relajarse en un entorno natural. Nada mejor que pasear por prados y bosques, tomar el sol en el estanco del bosque cercano, disfrutar en verano de la taberna al aire libre y pasar un rato agradable en la zona de juegos adyacente. Además, los huéspedes pueden tomar una cerveza bien fría y un tentempié abundante en la charcutería del establecimiento.